martes, 15 de diciembre de 2015

Oruro Feriantes de navidad "No vamos a respetar nada"

Con la amenaza de no respetar los espacios establecidos por la municipalidad, para el asentamiento de puestos en la vía pública, la feria navideña se instaló ayer por la noche en la avenida 6 de Agosto. Funcionarios ediles intentaron dejar pasos peatonales adecuados, pero las comerciantes aseguraron que no permitirán que se les quite ni un centímetro.

Tal como se había acordado en una reunión de coordinación entre feriantes, vecinos y autoridades ediles, ayer por la noche se efectuó el marcado de puestos y pasos peatonales y de garajes, sin embargo este trabajo fue a medias por dos razones; primero porque muchos comerciantes armaron sus casetas antes de que lleguen los guardias municipales y segundo, debido a la intransigencia y constantes amenazas de los gremiales, de no acatar lo dispuesto por los ediles.

"Tengo todos los documentos, pueden revisar, no nos van a quitar nuestro espacio, deben rayar donde es, no vamos a respetar nosotros a los gendarmes, no vamos a respetar nada", gritaba una comerciante que no dio su nombre, mientras los guardias municipales marcaban el paso peatonal en una intersección de la avenida 6 de Agosto.

El jefe de la Unidad de Defensa al Consumidor del Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO), capitán Rolando Silva, intentó efectuar una labor similar a la realizada en ocasión de la feria de Todos Santos, sin embargo tropezó con la intransigencia y alevosía de algunas comerciantes, que aseguraron que no permitirán variaciones en el marcado de los puestos.

Según el compromiso entre el alcalde Edgar Bazán, vecinos y feriantes, se debían respetar garajes, pasos peatonales en esquinas y las aceras, pero llegado el momento de la marcación, los espacios de los cruce de cebra, fueron ocupados con puestos o se dejó un espacio reducido.

En el caso de los garajes, la mayoría de los accesos no fueron respetados, aunque en algunos casos se acordó una compensación de los comerciantes a los vecinos, con el pago de un parqueo en otro lugar, mientras dure la feria.

Varios vecinos expresaron su molestia, porque consideran que de nada sirve firmar acuerdos con los feriantes, toda vez que no son respetados a cabalidad y se continúa cediendo a sus exigencias, como si fueran propietarios de las calles.

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