El lugar se ha convertido en uno de los sectores más concurridos del campo ferial y tiene una amplia oferta que va desde un plato de sopa de maní a 8 bolivianos, pasando por comida gourmet, sillpanchos y un churrasco a 40 bolivianos.
Este lugar tiene más de 2 mil metros cuadrados de espacio para los comensales que se acomodan en una de las más de 500 mesas dispuestas. El flujo es casi constante; el sector gastronómico es uno de los principales del recinto ferial.
Entre las ofertas internacionales se puede encontrar comida griega con los sándwiches Gyros, comida mexicana y otros.
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