El nuevo campo ferial de La Paz, denominado Chuquiago Marka, tendrá tres edificios, los cuales estarán interconectados a través de pasarelas peatonales. Éstas permitirán a los visitantes no salir de esa infraestructura si desean trasladarse de un bloque a otro.
La Unidad de Coordinación de Programas y Proyectos, dependiente del Ministerio de Economía y Finanzas, informó que “el concepto del proyecto mejorará de forma notable la infraestructura de exposiciones y convenciones disponibles en esta urbe”. Estas instalaciones se ubican en el espacio que ocupaba el antiguo recinto ferial de Següencoma, aunque la nueva construcción se extiende en un área de 40.325 metros cuadrados. El presupuesto de esta obra supera los 65,7 millones de bolivianos.
Este espacio tendrá una capacidad para albergar 600 stands de exposición; pero además contará con un área de exposición abierta para 170 puestos, plaza de comidas, áreas de juego, depósitos y un parqueo de estacionamiento para 315 vehículos.
“Con la construcción de este equipamiento se pretende incentivar las inversiones, fomentar la industria, el comercio y los servicios, al brindar un espacio adecuado para exposición y comercialización”, informa el texto que envió la unidad de proyectos a un requerimiento de este medio de comunicación.
La obra tiene un avance físico del 50% y su conclusión está prevista para el segundo semestre de este año. Será inaugurada con la Feria Internacional del Libro, que en los últimos años se realizó en el Círculo de Oficiales del Ejército, informó el vicepresidente de la Cámara Departamental del Libro, Carlos Azurduy.
“Hemos sufrido durante todo este tiempo por la falta de un espacio amplio y cómodo, que nos permita contar con mayor participación de socios e invitados internacionales, que nos ayude, además, a hacer otras actividades colaterales”, afirma.
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La espera de la obra
Desde ahora, cinco organizaciones manifestaron su interés en efectuar actividades en este nuevo espacio: la Federación de Empresarios Privados de La Paz (FEPLP), la Confederación Nacional de la Micro y Pequeña Empresa de Bolivia (Conamype), la Cámara Departamental del Libro, y los emprendimientos Feria a la Inversa y la Feria Internacional de La Paz (FIPAZ).
Los dirigentes de la FEPLP y la Conamype proyectan crear eventos anuales. El secretario general de la federación, Alberto Gómez del Carpio, plantea crear una feria internacional “de gran trascendencia”, como la que se realiza en Santa Cruz, para lo cual sugiere que los privados se asocien con las cámaras locales de comercio e industria.
“Un campo ferial es un sueño que tenemos los paceños para mostrar nuestros productos”, sostiene el ejecutivo.
Víctor Ramírez, presidente de la Conamype, perfila una “feria nacional” para que los micro y pequeños empresarios de todo el país expongan sus productos.
Por su parte, los representantes de la Fundación Feria a la Inversa -que organiza ferias en Bolivia y Honduras- y la FIPAZ -que este año efectuará su exposición en el Coliseo Cerrado- planean efectuar sus eventos en este espacio.
Gerardo Dick, presidente de FIPAZ, sostiene que “definitivamente debemos formar parte para hacer nuestras exposiciones dentro del espacio ferial, tomando en cuenta la historia y el apoyo que le hemos dado desde los inicios a este proyecto”.
Punto de vista
Flavia Giménez - Coord. de Ferias a la Inversa
Es esencial para la competitividad de La Paz y El Alto
El campo ferial que se construye en la zona de Següencoma significa que las ciudades de La Paz y de El Alto aumentan un “ingrediente” esencial a su competitividad. El objetivo central de un campo ferial de las características del que está en edificación es multiplicar las relaciones económicas para que productores, emprendedores, empresarias y empresarios de todos los horizontes encuentren mayores y mejores oportunidades de desarrollo.
Para nosotros, esta infraestructura representa la posibilidad de organizar ferias a la inversa con muchas empresas o entidades demandantes (privadas o públicas) y con ellas generar miles de oportunidades de firmar contratos, en pocos días; además de dar oportunidad en igualdad de condiciones a productores, emprendedores, empresarios y empresarias y así hacer de La Paz una ciudad de buenos negocios no sólo en el ámbito local, sino también para los países cuyas fronteras se encuentran a pocos kilómetros.
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