Al atravesar el mundo, los importadores bolivianos no sólo se encuentran en China con ferias inmensas y ciudades enteras dedicadas a crear un solo producto, sino también con una cultura ante la cual mantienen sus creencias y costumbres.
En estos años de operaciones de IX Logistics, que organiza viajes a negocios a China, sus ejecutivos fueron testigos de muchas situaciones anecdóticas.
Uno de sus directivos, Luis Ayllón, recuerda que una comerciante de pollera de Oruro dudaba sobre cómo debía viajar, pero se enteró de que su destino, la feria Guangzhou, en Cantón, era un centro de encuentro de gente de todo el mundo que llevaba su vestimenta tradicional.
Así, la mujer emprendió la travesía. Ya en Guangzhou, en la puerta de la feria, al bajar del bus dio un traspié y lamentablemente se cayó. Ayllón, quien era su asesor y estaba cerca de ella, percibió el gran susto que se llevó la orureña.
"Iniciamos el recorrido de la feria y después de una hora, más o menos, se detuvo y me dijo: ‘Tengo que volver a donde me he caído para recoger mi ajayu (alma). Estoy muy asustada’. Le expliqué que debíamos caminar muchísimo y quise distraerla con lo que hacíamos, pero ella insistió. Volvimos al lugar, recogió un poco de tierra y se la metió a la boca”, recuerda.
Pablo Paz, también de IX Logistics, relata que un comerciante viajó con su hijo que "comía todo lo que se le ponía enfrente”, según él porque el "estómago boliviano es indestructible”.
Sin embargo, una noche se le presentó una infección estomacal de tal magnitud que tuvo que ser internado de emergencia en un hospital chino.
"Estaba hinchado como una pelota. Lo llevamos al hospital, donde él vio que la medicina china era diferente a la nuestra. Le revisaron las manos, los pies y le dieron unas pastillas diminutas. Estuvo dos días internado. Estaba completamente asustado”, cuenta el guía de comerciantes bolivianos.
En China, los importadores bolivianos se encuentran con empresarios que les brindan toda su amabilidad y buen trato, porque para ellos el cliente es lo más importante, explican.
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